L’Hôtel du Midi

El siglo XIX vio el apogeo de comerciantes, posaderos y molineros, que compraron propiedades nacionales y se beneficiaron de la especulación de la revolución y del tráfico de las guerras del imperio. La población profesional urbana se duplicó entre 1806 y 1837, prueba del despertar económico de la ciudad.

Muchas casas se construyeron con decoraciones de terracota, siguiendo la moda. La obra maestra del género fue el Hôtel du Midi, construido en 1862 por el posadero Monsieur Layrisse. El aumento del número de pos adas es una prueba más del desarrollo comercial de la ciudad, que debe acoger cada vez a más visitantes.

Para los mercados y ferias de Rieumes, que se celebraban los jueves, los vendedores y compradores, sobre todo los criadores de caballos, llegaban la víspera y no se marchaban hasta el viernes. En 1885, el maestro de escuela Monsieur Polié escribía que el día de mercado «abundan los hoteles, posadas, cafés y cobertizos, de modo que no falta nada para satisfacer las necesidades de los extranjeros».