Idealmente situado a las puertas del Gers, Sainte-Foy-de-Peyrolières se encuentra a 30 kilómetros al suroeste de Toulouse y forma parte del cantón de Cazères. El municipio, de 3.802 hectáreas, cuenta con dos grandes aldeas, Le Parayre y La Salvetat.
El centro de la ciudad posee un bello conjunto arquitectónico, con casas de carácter construidas con ladrillo rojo, guijarros y ladrillo crudo. Se pueden ver las casas del último juez real (1791), los notarios reales, el ayuntamiento y la escuela (1880), el mercado y la iglesia.
Una línea de ferrocarril procedente de Toulouse (estación de Roquet) estuvo en servicio de 1901 a 1949. Aún son visibles la estación, la cisterna y los restos de un puente sobre el arroyo Galage.